Los principales bancos de inversión internacionales y locales han reevaluado el panorama económico chileno luego de la primera vuelta presidencial. Según informa Ex-Ante, estos bancos coinciden en que los resultados electorales reducen los riesgos extremos para la economía y abren un escenario más favorable al mercado. No obstante, advierten que la falta de mayorías legislativas obligará a una fuerte negociación en el Congreso.
El avance de los candidatos José Antonio Kast y Jeannette Jara al balotaje ha reordenado las proyecciones.
JP Morgan: Este banco estadounidense ve una ventaja clara para Kast y una mayor probabilidad de un «cambio de régimen hacia una administración más market-friendly«. Destaca que la suma de votos de la derecha (más del 50%) le da un mandato robusto para impulsar reformas de oferta y disciplina fiscal. El banco mantiene una posición overweight (sobreponderada) en el peso chileno (CLP), anticipando que su apreciación continuará.
LarrainVial Research: Calificó la diferencia de votos entre los candidatos como «más estrecha de lo anticipado«, favoreciendo a Kast. Señala que el candidato Franco Parisi (19,7%) y sus 14 diputados se vuelven un actor decisivo. LarrainVial proyecta que el programa de Kast se enfocará en reducir la permisología mediante acciones administrativas y legislativas. Advierte que el empate en el Senado podría frenar cambios tributarios, como la rebaja del impuesto corporativo.
Morgan Stanley: Este banco también considera que el resultado reduce los riesgos extremos para la bolsa y podría acelerar reformas en curso. Aun así, recortó su posición en acciones chilenas al considerar que las noticias favorables ya están integradas en los precios. Sobre el peso chileno, estima un escenario «cercano a optimista» con una administración favorable al mercado, pero advierte que la falta de mayorías simples podría diluir el programa fiscal y retrasar que el dólar caiga de inmediato bajo los $900.
Itaú: El banco brasileño subraya que el balotaje se dará con un Congreso dividido, lo que forzará a la negociación transversal para aprobar leyes. Itaú considera que Kast llega con una ventaja estadística y que la agenda pública se centrará en seguridad, crecimiento y empleo. El banco proyecta que un gobierno de Kast priorizaría la seguridad, la eficiencia del Estado y las medidas pro-inversión en los primeros 100 días.
En resumen, los bancos proyectan un giro promercado que favorecería la inversión y la apreciación del peso, especialmente si Kast gana en el balotaje. Sin embargo, todos advierten que la fragmentación legislativa será el principal límite para implementar reformas estructurales sin necesidad de negociar.
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