Durante una entrevista en el evento Hard Fork Live!, el CEO de OpenAI, Sam Altman, abordó los efectos de la inteligencia artificial (IA) en el empleo, la privacidad, las alianzas estratégicas y los desafíos éticos del sector. Afirmó que, aunque la IA traerá beneficios a largo plazo, “va a haber un impacto negativo real” y que este proceso ocurrirá más rápido que en revoluciones tecnológicas anteriores.
Altman señaló que no hay evidencia de una destrucción masiva de empleos de entrada, pero reconoció que ciertas áreas laborales desaparecerán. A pesar de ello, sostuvo que la demanda humana y la imaginación son infinitas, y que la tecnología llevará a nuevas formas de empleo y mayor prosperidad general. Los trabajadores jóvenes, según él, serán quienes mejor se adapten a este nuevo escenario laboral.
Por su parte, el COO de OpenAI, Brad Lightcap, destacó que las empresas están más preocupadas por los empleados con más antigüedad que no adoptan nuevas herramientas, que por los trabajadores jóvenes, quienes son más ágiles con la tecnología.
Respecto a la privacidad, Altman defendió la postura de la empresa frente a la demanda del New York Times por derechos de autor, enfatizando que la privacidad de los usuarios es una línea roja para OpenAI.
En la conversación también se abordaron las tensiones con Microsoft, uno de sus principales socios. Altman reconoció la existencia de diferencias, pero aseguró que la relación ha sido beneficiosa. En cuanto a Meta, bromearon sobre la competencia por el talento en inteligencia artificial.
OpenAI también avanza en el desarrollo de hardware junto a Jony Ive, exdiseñador de Apple, y ha firmado contratos con sectores como defensa (por US$200 millones) e industria del juguete (Mattel). Altman adelantó que trabajan en un modelo avanzado llamado O3, capaz de anticipar las necesidades del usuario.
Sobre regulación, Altman indicó que se necesita un marco adaptable que se enfoque en los riesgos reales de la IA. Advirtió que una legislación demasiado detallada podría quedar obsoleta rápidamente.
Finalmente, Altman compartió reflexiones personales sobre los vínculos entre humanos e inteligencia artificial, mencionando que, aunque valora el rol de la IA, preferiría que su hijo no sustituyera amistades humanas por relaciones con sistemas como ChatGPT.